Las zapatillas de ballet, son ligeras, diseñadas para la práctica del ballet. Se hacen de cuero, lona, o satén suave y tienen suelas finas y flexibles. Las "zapatillas de ballet" están disponibles en rosa, negro, gris o blanco. Tradicionalmente, las mujeres los usan rosadas y los hombres blancos, mientras que los colores carne o carmelitas que dan la apariencia de bailar sin ellas son llevados tanto por ambos sexos.
Los bailarines de ballet principiantes menores de doce años llevan zapatillas exclusivas mientras practican, las jóvenes más avanzadas pueden llevar zapatillas de ballet de punta. A los bailarines jóvenes les está prohibido el uso de zapatillas de ballet hasta que se les allá desarrollado en toda plenitud sus huesos y sus músculos sean suficientemente fuertes para poder bailar en punta. Los bailarines llevan casi siempre zapatillas de ballet suaves, pues raramente bailan en punta.
En los centros educativos de ballet imparten clases de técnica, en las que los bailarines usan solamente zapatillas de ballet, y de punta, y los estudiantes usan primero las zapatillas de ballet para practicar en la barra, y después las sustituyen por zapatillas de punta para los ejercicios de centro. Muchas escuelas exigen como mínimo cinco años de experiencia antes de permitir que sus bailarines bailen en punta.
Zapatillas de ballet, fabricación:
Como muchos otros tipos de zapatillas de ballet pueden tener la suela partida (para aumentar la flexibilidad) o la suela completa. Generalmente son fabricadas de cuero, de lona o de satén suave:
Las zapatillas de cuero tienen una mayor duración y ayudando a mantener los pies calientes. Las zapatillas de cuero son sin duda las más flexibles, cómodas y las más costosas.
Las zapatillas de lona son llevadas generalmente por los hombres. Cuestan menos que las zapatillas de ballet de cuero. Las de lona permiten que el pie respire, pero se gastan con más facilidad que las de cuero.
Las zapatillas de satén, son llevadas por las mujeres. Se tiñen fácilmente para cambiar su color para ocasiones exclusivas.
Los soportes elásticos se utilizan para ayudar a ajustar las zapatillas de ballet a los pies. Estas zapatillas generalmente tienen dos bandas elásticas que se ajustan bien al empeine del pie.
Las zapatillas de suela partida utilizan dos bandas, mientras que las de suela completa apenas utilizan una. En el caso de una sola banda, la mayoría de los fabricantes de zapatillas de ballet atan la banda a las zapatillas durante su fabricación. En el caso de las zapatillas de doble banda, los fabricantes atarán típicamente un extremo de cada banda a la zapatilla y dejarán al cliente atar los extremos libres de las bandas para realizar un ajustado perfecto.
Zapatillas de punta para ballet:
Las zapatillas de puntas son similares a las zapatillas anteriormente mencionadas pero con refuerzo en la parte delantera. Su objetivo es que las bailarinas de ballet se levanten sobre ellas apoyando su peso corporal sobre las puntas. Otro de sus objetivos es proporcionar una apariencia de ligera durante la presentación, que parezca volar sobre el suelo o evitar el ruido al caer tras un salto.
En sus inicios las bailarinas ponían algodón para reforzar la punta mientras que hoy en día la zapatilla cuenta con una estructura más rígida en la que se apoyan los dedos de los pies.
Estas zapatillas no se utilizan hasta el segundo o tercer año de práctica. En las actuaciones, también se emplean posterior a los ejercicios de barra y su uso es muy bueno para reforzar los músculos del pie y ejercitar el equilibrio al posarse sobre ellas. Existen diferentes zapatillas en cuanto a nivel y rigidez con diferencia en su suela. La elección dependerá de la bailarina en función del grado de fortaleza y destreza de sus pies.